Hackeando la Matrix:
Cuanto más te pegas a tus deseos y a tus pretensiones, más
poderoso es el imán que atrae todo lo opuesto. Lo que literalmente sucede es
que has tomado al mundo por el cuello y el mundo se resiste, tratando de liberarse.
Empujarle e insistir, no tiene sentido, la situación sólo empeorará. En vez de
eso tienes que cambiar conscientemente tu actitud hacia la situación. Una vez
sueltas tu agarre y dejas de “tomar al mundo por el cuello”, el mundo
inmediatamente empieza a comportarse amistosa y obedientemente.
¿Y por qué están las partes opuestas constantemente luchando?
A primera vista, debería ser al contrario: enfrentarse,
extinguirse una a otra y asentarse... Pero no, los opuestos “se molestarán” uno
a otro, hasta que empiecen a “luchar”, y si nadie los separa esto continuará para
siempre.
Sucede lo siguiente: si eres molestado por algo, tus nervios
se tensan, al menos hasta cierto punto. Como si en relación a eso, una araña
aparece y empieza a saltar y a trepar, tensando así tus nervios aún más. Tú
estás agobiado y la araña sigue saltando más y más. Hay muchas maneras de
aumentar la tensión. Supongamos que estás apresurado para llegar a alguna parte
y tienes miedo de que pudieras llegar tarde. Desde ese momento todo funciona en
tu contra. La gente se pondrá en tu camino y caminará más lento y tú no serás
capaz de adelantarlos. Tienes que salir por la puerta lo más pronto posible, y
frente a ella hay toda una gran fila de gente indolente que apenas anda. Eso
sucede con los coches en la calle. Como si todo el mundo hubiera conspirado
contra ti.
Y este empuje externo se hace más intenso cuanta más tensión
acumulas. Cuanto más fuerte es, más activamente los demás te fastidian. Pero
hay algo interesante: no se comportan de ese modo deliberadamente. Ni siquiera
piensan en ello, que están molestando a alguien. ¿Cuál es la razón para tal
comportamiento? En la mayoría de los casos la gente es llevada por motivos
inconscientes. Pero lo sorprendente no consiste en eso, sino en la fuerza motriz
que está formando los motivos inconscientes, y la cual no está dentro de la
psique humana sino fuera de ella. Esa fuerza consiste en las invisibles pero
reales entidades informacionales energéticas creadas por la energía mental de
los seres vivos, los péndulos. Los péndulos siempre aparecen donde pueden
alimentarse de la energía de los conflictos.
No deberíamos suponer que estas entidades son capaces de
tramar algo y realizar un intento consciente. Los péndulos pueden sentir la
polarización como una no homogeneidad del campo energético y se esfuerzan por
adherirse ahí. Pero eso no es lo alarmante. Lo terrible es que no simplemente
absorben la energía del conflicto, sino que de algún modo hacen que la gente se
comporte de tal modo como para dar más energía. Los péndulos hacen eso, así que
tienen una abundancia de energía. Tiran de la gente con cuerdas invisibles y la
gente obedece como marionetas. Para ellos la clara conciencia humana es inaccesible,
pero eso no es necesario, todo lo que requieren es el subconsciente.
Habitualmente toda la gente está dormida en la vida real. Uno hace un montón de
cosas automáticamente, sin pensar.
El nivel de consciencia es especialmente bajo cuando una
persona está en casa o en una multitud. En un entorno doméstico, la necesidad
de un autocontrol aumentado no es alta, por eso uno se relaja y casi dormita. En
un círculo externo pero estrecho de conversación, al contrario, la consciencia
es la más activa y está ocupada con el autocontrol. Mientras en una gran
reunión pública, las acciones de la persona otra vez se hacen espontáneas, y
también caen en una fuerte correlación con el impulso general de la masa. A fin
de demostrar el funcionamiento del péndulo, tomemos el ejemplo más sencillo, un
transeúnte que tú quieres adelantar. Cuando tú decides ir por la izquierda, él
hace un movimiento espontáneo hacia la izquierda, como si deliberadamente se
pusiera en tu camino. Tú tratas de ir hacia la derecha, y él inconscientemente
va en la misma dirección. ¿Qué hace que el transeúnte cambie de dirección? Él
no te ve, ni se preocupa de que tú quieras adelantarlo ¿Quizás de algún modo
siente con su espalda que te estás acercando e instintivamente no quiere dejar
que su “competidor” siga adelante? A primera vista esta es la explicación y sin
embargo no es así. Si estamos hablando de instintos, en la naturaleza la
rivalidad siempre ocurre cuando las partes opuestas se enfrentan una a la otra.
Una persona anda sin pensar dónde pisa, de modo que pueda
moverse hacia delante. En esa relación uno está dormido, por eso la línea de
los pasos de uno de vez en cuando cambia a un lado o al otro. La motivación, es
decir la elección de la dirección, está situada en el subconsciente que en este
momento no está controlado... y está potencialmente abierto al péndulo.
Tú apareces y tratas de adelantarlo. De hecho eso es un
conflicto, aunque sea menor. A fin de aumentarlo, el péndulo hace que el
transeúnte haga un cambio inconsciente a fin de ponerse en el camino y agudizar
la situación.
Al mismo tiempo, él no hace eso a propósito, porque no tiene
un intento consciente. Y de nuevo, inconscientemente, las fuerzas equilibrantes
hacen su trabajo. Una vez más resaltamos esto: se trata de procesos cuyo
mecanismo normalmente no está claro, y no hablamos de comportamiento
consciente. Sólo estamos marcando las distintas manifestaciones y leyes de la
naturaleza del mundo informacional energético. No tiene objeto discutir cómo el
péndulo funciona en una situación dada, de dónde viene, o cómo se las arregla
para hacer eso y lo que realmente está ocurriendo ahí, a un nivel energético.
Lo único que importa es una conclusión básica: si las fuerzas
equilibrantes enfrentan a los opuestos, los péndulos hacen todo para aumentar
la energía del conflicto que ha surgido. Esa es la ley del péndulo. Las
interminables batallas de los péndulos, ya sean escándalos familiares o
conflictos armados, todas están sucediendo de acuerdo con esta ley. Cuando un
enfrentamiento emerge, los acontecimientos se desarrollarán hasta la
agudización del conflicto, no importa lo que suceda, incluyendo los temporales
y 'decorativos' tratados de paz. Donde la ley del péndulo está funcionando, el
sentido común no está disponible. Por eso las acciones de la persona
individual, así como de países enteros a menudo no encajan dentro del marco del
sentido común. En una situación conflictiva, las motivaciones humanas están
bajo el control del péndulo.
El resultado es un extraño efecto: tú percibes tus acciones
pasadas como un sueño, “¿Qué estaba yo pensando? ¿Por qué hice eso?” Porque la
persona actuó sin darse cuenta de ello. Apenas después, cuando la consciencia
no está ya bajo la influencia externa, él evalúa adecuadamente lo que sucedió. Las
parejas discuten y se separan, porque están convencidos de que son
incompatibles. Pero ellos tuvieron momentos felices, cuando todo era
simplemente magnífico. Y de pronto, una persona cambia y empieza a comportarse
de un modo hostil. Esto no corresponde en absoluto con su comportamiento
anterior. ¿Suena familiar, no? En realidad, la razón no es que una u otra
persona haya cambiado. Uno puede comportarse de manera inaceptable para la
pareja, porque así es como el péndulo le hace actuar. Regula la motivación
subconsciente de la gente oponiéndolos uno a otro. Y ese control es orientado a
aumentar la energía del conflicto. La gente no puede darse cuenta de que son
obligados a enfrentarse con los demás. La gente puede actuar de una manera
absolutamente ilógica e inadecuada.
Este efecto es particularmente claro en caso de crímenes
inexplicablemente crueles. Después cuando el sujeto está en el juicio, mientras
recuerda sus acciones pasadas con estupor: “Era como si mi consciencia estuviera
en una niebla.” Y no miente, fue realmente de ese modo. Para el criminal mismo
lo que es completamente inesperado es que él percibe su acto como un sueño
terrorífico. El sueño se hace particularmente fuerte si la atención cae bajo el
aro de la obsesión. En sociedades específicas, como en el ejército, en un grupo
o una secta, se crea un entorno con estereotipos definidos de comportamiento y
pensamiento. Eso hace que el subconsciente esté “dormido” y completamente
abierto al efecto zombi del péndulo. Entonces podrían suceder cosas, que si se
miran desde fuera, parecen absolutamente desquiciadas.
La fuente universal del “mal” - los péndulos. Cuando lo
observamos por un tiempo, se vuelve absolutamente claro: cualquier cosa que
hagas en cualquier conflicto de una cosa con otra, todo apunta a aumentar la energía
del conflicto. Incluso si la lucha se detiene por un tiempo, eso no dura mucho,
y después emerge con nueva fuerza. Por supuesto hay todo tipo de péndulos y son
destructivos en diferente medida.
Lo principal es no ser una marioneta y actuar conscientemente
a fin de utilizar estas estructuras para tu beneficio.
¿Cómo romper con esa influencia? Despierta y date cuenta de
qué manera el péndulo está tratando de manipularte. Cuando te das cuenta de qué
está pasando, la mitad del trabajo está hecha. El poder de la influencia del
péndulo es inversamente proporcional a la conciencia. Tiene poder sobre ti sólo
mientras tú duermes en la vida real.
Antes que nada, no participes en las batallas destructivas de
los péndulos, si tú personalmente no tienes necesidad de ellos. Cuando estés en
una multitud, tienes que salir de la escena a fin de mirar alrededor y despertar
“¿Qué estoy haciendo aquí? ¿Me doy cuenta de lo que estoy haciendo? ¿Para qué
necesito esto?”
El despertar del sueño lúcido debe ser absolutamente claro,
como mencionamos antes: “En este momento ya no duermo y me doy cuenta
claramente de lo que estoy haciendo, para qué y por qué razón.” Si tú te das cuenta
de eso, las cosas irán bien. Si no, entonces en cada situación, incluso
pequeña, eres una marioneta. Es más complicado cuando algo te molesta. En esta
situación la araña saltará, mientras la tensión exista. Habitualmente esto
significa que el péndulo ha obsesionado tu atención. A fin de liberarte de él,
necesitas volverte indiferente… Esto podría ser difícil.
Lo mismo es válido para todas las demás situaciones. Cuando la
“araña salta”, eso significa que tu atención está obsesionada. Tú has sido
atraído al juego del péndulo, cuya meta es aumentar la energía del conflicto. Para
liberarte de ese enganche, necesitas enfocar tu atención en otra cosa. Hablando
en general, las cosas no son tan malas. Las cosas irán bien si tú no duermes en
la vida real. Aunque puedes pensar que todo lo dicho hasta aquí es una especie
de cuento de hadas, y por supuesto no es fácil acostumbrarse al pensamiento de
que algunas entidades te controlan.
Aceptar o no este conocimiento, es una cuestión de elección
personal. Y tú no tienes que creerlo.
Observa y saca tus propias conclusiones. (Vadim Zeland)