Existen cuatro fuentes principales de creencias
limitadoras que podemos tener activas en nuestra psiquis y que inciden en
nuestro patrón de percepción y creación de la realidad.
1° Nosotros mismos: son los bloqueos auto-generados,
energéticamente tenemos mucho potencial mental y emocional y nosotros mismos
podemos auto-bloqueranos, a través de, pensamientos, emociones y la capacidad
que tenemos de generar el mundo en el que vivimos.
2° Proyección energética
de los demás hacia nosotros: un bloqueo puede venir proyectado por otra persona. Un ejemplo sencillo
y genérico, si te sientes al lado de una persona con mal humor y te enganchas
su mal humor.
3° Heredados de
nuestro transgeneracional: los cuales están especificados en terapias como constelaciones
familiares o registros akshicos.
4° Energías que captamos
del inconsciente colectivo.
Creencias Limitantes: son patrones energéticos,
autogenerados, proyectados, heredados o recogidos, que poseen la característica
de bloquear la manifestación de un área de vida. Están ancladas en nuestro
sistema energético y va a bloquear en nuestras vidas todo aquello que esté
referido a su configuración. Podemos tener creencias limitadoras que pueden
afectar solo un área de vida, otra que afectan a tres y otras que nos afectan
por completo.
Normalmente todas las creencias limitadoras suelen
estar en el cuerpo mental, que es uno de los cuerpos sutiles que poseemos, y es
el cuerpo que tiene más poder a la hora de manifestar nuestra realidad exterior.
Si tenemos en el cuerpo mental un montón de
creencias limitantes, impide que la energía que generamos manifieste el área de
vida como esperamos.
Debido a las experiencias del pasado donde no
nos fue bien, que pudimos sentir que no éramos merecedores de cariño, aceptación,
etc., eso genera en nosotros mismos un estado del ser, que son pensamientos
asociados con una emoción de no merecer, que bloquean el potencial que tenemos en algún
área.
En el proceso de manifestación de la realidad,
nuestros cuerpos mental y emocional, son los que tienen el potencial de enviar el
concepto al exterior a nivel energético, para que luego se manifieste a nivel físico.
Existen energías genéricas de todo aquello que
quieres manifestar, la abundancia, el amor, etc., es onda que nos rodea
constantemente. Cuando nosotros sintonizamos esa onda y la emitimos al universo
es cuando se produce el proceso de manifestación en resonancia de la onda que
hemos emitido.
Ahora, cuando sintonizamos con la onda de la
abundancia, lo que lanzamos al exterior no es solo la onda de abundancia sino
también la onda contraria, porque tenemos una creencia que nos hace transmitir “no
me lo merezco”, entonces, oscilas entre “quiero abundancia” y “no me lo merezco”.
La onda que va a ganar va a depender del
sentimiento asociado a la creencia limitadora, ya que esa emoción ha generado
una huella en el campo electromagnético por el tiempo que lleva trabajando en
nuestro sistema energético.
¿Cómo liberarnos de
las creencias limitantes?
Haz una lista de las áreas de vidas, por ejemplo,
vínculo materno y/o paterno, dinero, pareja, etc., ahora, elige un área de vida
y asígnale un valor del 1 al 10 para determinar en qué nivel se encuentra esa área,
si su valor es menor a 6 ya puedes darte cuenta que hay algo que no está yendo
bien. Recórrelas una a una.
Ahora, solo necesitamos hacer una introspección
respecto al área seleccionada, es decir, cómo me siento y pienso respecto a
ella, cómo me veo ante esta situación y lo que ella me hace sentir, que creo de
mi respecto a ésta área. Ve conectando con todas las sensaciones que van
llegando, observa tu cuerpo si hay alguna molestia y adiciónalas al proceso de
integración. Puedes medir la intensidad del 1 al 10 de la sensación o emoción
que ha llegado y te haces consciente hasta que su intensidad llegue a 1 o
desaparezca y luego continúas con la siguiente.