La búsqueda de la seguridad es una ilusión. Según las antiguas sabidurías tradicionales, la solución a todo este dilema se encuentra en la sabiduría de la inseguridad, o de la incertidumbre. Esto quiere decir que la búsqueda de la seguridad y de la certidumbre es, en realidad, un apego a lo conocido.
Y ¿qué es lo conocido? Lo conocido es nuestro pasado. Lo conocido no es otra cosa que la cárcel del condicionamiento pasado. En ello no hay ninguna evolución.
Y cuando no hay evolución, hay estancamiento, entropía, desorden y descomposición. La incertidumbre, por su parte, es el terreno fértil de la creatividad y la libertad puras.
La incertidumbre supone adentrarse en lo desconocido en cada momento de nuestra existencia. Lo desconocido es el campo de todas las posibilidades, siempre frescas, siempre nuevas, siempre abiertas a la creación de nuevas manifestaciones.
Sin incertidumbre y sin lo desconocido, la vida no sería más que la repetición trillada de recuerdos gastados. Nos volvemos víctimas del pasado, y nuestro verdugo de hoy es el yo que nos queda de ayer.
(Deepak Chopra)