Es una energía muy bloqueante, bloquea muestro vivir, nos impide avanzar, afrontar y nos impide realmente sentirnos plenos.
Tipos de Miedos
Miedos: a equivocarme, a hacerlo mal, a que hablen mal de mí, a ser, a fallar.
Miedos en las relaciones: al abandonado, a no ser querido, a la soledad, a la tristeza.
Miedos físicos: a mi seguridad, a la enfermedad, a que me hagan daño, a no tener trabajo, a no ser fuerte, a no afrontar.
Miedos físicos: a mi seguridad, a la enfermedad, a que me hagan daño, a no tener trabajo, a no ser fuerte, a no afrontar.
Todo miedo nos habla de carencias personales, es interesante ver cuál te asusta más, cuál en tu día a día se repite más. Lo que te asusta ahora mismo, en el terreno en el que te mueves, por ejemplo en las relaciones, habla de una carencia afectiva, de un vacío afectivo, y si tienes miedo a algo físico estamos hablando de una zona energética, tengo carencia de energía, no desarrollas el potencial de energía que eres.
Cuando tienes miedo de repente te sientes bloqueado y no sabes qué hacer, a dónde ir y te paralizas. Luego se empiezan a activar todos los programas que se encuentran en nuestro inconsciente: no sé cómo hacerlo, no puedo, no valgo, no soy capaz, etc. para mantener la energía del miedo que te paralizará físicamente.
Detrás del miedo existe una asociación a una emoción más profunda, y de la cual no queremos experimentar, puede ser una emoción de angustia, ansiedad, dolor, de qué me va a pasar. Entonces, no es tanto la situación externa que sucede sino que es la emoción interna que se activa, que luego la ocultamos generando un bloqueo en nuestro cuerpo emocional y energético dejando así una huella que permitirá resonar y funcionar como un imán que atraerá nuevas experiencias que confirmarán dicho estado emocional.